- PÚBLICO: General
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Durante los tres primeros meses de 1918, la Secretaría de Hacienda realizó un análisis de los intereses generados a causa de la deuda adquirida por el régimen huertista entre febrero de 1913 y julio de 1914, así como la contraída entre 1914 y 1916. Como resultado, el gobierno determinó que se debía pagar el saldo insoluto.
El gobierno federal buscaba pagar no sólo los intereses, sino también el capital, y de ésta manera bajar el monto total de la deuda y los créditos hipotecarios. En uso de las facultades extraordinarias en el ramo de Hacienda, y para formalizar esta intención de pago a los acreedores extranjeros y nacionales, el presidente Venustiano Carranza decretó el Reglamento de pagos, aplicable sólo al saldo insoluto.
En caso de juicios establecidos por particulares de procedencia extranjera para el pago de deuda contraída o el pago de créditos hipotecarios, el fallo resolutivo lo tendría la Suprema Corte de Justicia de la Nación. Se rechazaba cualquier tipo de injerencia de gobiernos extranjeros. Este reglamento abrogaba las anteriores leyes relativas.
